Producto del alza del dólar y la caída del oro en los últimos días, la correlación inversa entre ambos -una teoría fundamental en las negociaciones de monedas- podría estar en vías de recuperación después de resultar ser una herramienta de negociaciones confiable en los volátiles mercados de los últimos meses.
Por ahora es demasiado pronto para conocer si la correlación se ha realmente restablecido, pero la caída del oro de la semana pasada junto a un repunte del dólar ofreció señales del retorno de la correlación, indican algunos operadores y analistas.
Por lo general se espera que el oro y el dólar se muevan en direcciones opuestas, con alzas del oro ante un dólar debilitado, y viceversa. Esto es porque los precios del oro, como otros bienes básicos, están denominados en dólares y por que el metal precioso es visto por muchos inversionistas como una moneda alternativa. Muchos lo consideran un refugio de valor para protegerse de la inflación, es decir, cuando el valor del dólar como fuente de poder de compra cae.
Esta relación clásica no ha sido muy clara en los últimos meses en medio de una extrema volatilidad del mercado, señalan los observadores. Pero con los recientes vaivenes en ambas partes de las negociaciones, una correlación que contrapone un dólar apreciado ante un oro debilitado estaría lista para volver, señaló Phil Streible, estratega de mercado en MF Global.
Una fuerte correlación inversa es tradicionalmente vista en un 75% negativo, indicó Jay Govender, estratega técnico jefe para América del Norte de Barclays Capital. La correlación oro-dólar ha estado zigzagueando entre las áreas del 50% positivo y negativo en los últimos meses, lo que la convierte en un indicador poco confiable para las negociaciones, señaló. Sin embargo, el lunes la correlación de 21 días del oro y el dólar alcanzó un 58% negativo, comparado con un 0% del miércoles pasado, afirmó.
"Lo que estamos viendo es que esta correlación inversa está empezando a afianzarse una vez más", dijo Govender. Pero advierte a los operadores que utilicen la correlación como una guía, que debería volver a cerca del nivel de un 75% negativo y mantenerse ahí de manera consistente, agregó.
Los observadores de mercado también destacan que la fuerte caída del oro desde los máximos históricos registrados a principios de este mes se debe a muchos factores más allá de las alzas del dólar. La semana pasada, los inversionistas abandonaron lo que habían sido posiciones extremadamente fuertes en el metal precioso. En vez de volcarse al oro como un activo de refugio en la reciente ola de pánico del mercado, los inversionistas liquidaron sus mayores posiciones, y las más rentables, en el metal precioso.
Además, el viernes el operador de la Comex, CME Group Inc., dijo que aumentaría en un 21% los requisitos colaterales para negociaciones en oro.
Incluso así, los estrategas esperan que la correlación negativa entre el metal precioso y el dólar vuelva al final a estar intacta, especialmente si el dólar sigue avanzando en los ansiosos mercados.
Ello podría implicar que el oro se fortalecería ante el euro, pero que permanecería a la baja ante la moneda estadounidense, señaló Streible de MF Global.