sábado, 17 de marzo de 2012

El sector petrolero lanza alerta por ataques guerrilleros



Los atentados terroristas contra la infraestructura petrolera colombiana vuelven a prender las alertas nacionales e internacionales.

De hecho, los grupos guerrilleros han arreciado sus ataques en el último año. Las acciones criminales van desde la voladura de oleoductos, destrucción de carros cisternas, secuestros a operadores y hasta acciones terroristas aprovechando problemas laborales.

El incremento de los ataques contra el sistema pasaron de un mínimo histórico de 31 en 2010 a 84 en 2011 según el Ministerio de Defensa. El secuestro de personal vinculado con la industria es también grave. El año pasado creció el 377 por ciento.

La preocupación que empezó en 2011 se transformó en un campanazo este año para las empresas operadoras, en especial para las extranjeras, que explotan los yacimientos de Vichada, Arauca, Caquetá y Santander.

Asesores en seguridad de estas compañías, a quienes se les solicitó la definición de un plan de protección, recomendaron al personal especializado, ingenieros y ejecutivos, moverse solo en sistemas de transporte aéreo para evitar plagios en las zonas de producción.

Los problemas de seguridad, incluso, trascendieron las fronteras nacionales y medios de impacto mundial como el diario estadounidense, The Wall Street Journal, acogieron la alerta sobre el tema.

"Una vieja amenaza ha resurgido que podría descarrilar el auge de su sector petrolero", señaló esta semana el influyente diario económico, que destacó que los ataques guerrilleros se producen en un momento en el que el Gobierno "planea subastar 109 distritos petroleros para exploración y que con ese fin busca atraer a algunas de las compañías petroleras más grandes del mundo".

Dicha publicación citó a Charle Gamba , director ejecutivo de la empresa petrolera Canacol Energy (que opera en Colombia), quien aseguró que "los inversionistas están tomando nota de nuevo de la situación de seguridad en el país".

Ola de ataques
Los ataques de los últimos 20 días confirman las alertas y el reclamo de seguridad al Gobierno por parte de la industria petrolera. El pasado lunes las Farc atacaron en Norte de Santander y Caquetá, donde bloquearon la carretera y dispararon contra varios camiones de la empresa petrolera Transamazonia, que se movilizaban desde San Vicente del Caguán hacía Huila. Dos conductores de los vehículos murieron al ser alcanzados por los disparos de fusil de los guerrilleros de la comuna móvil Teófilo Forero Castro de las Farc.

Un día antes, dos atentados dinamiteros en los municipios nortesantandereanos de Teorama y Convención causaron graves daños en los oleoductos Caño Limón-Coveñas y El Zulia. A estos se suma el secuestro de 11 trabajadores de un consorcio que construye el Oleoducto Bicentenario, proyectado como el más grande del país con 960 kilómetros y que transportará petróleo desde los Llanos Orientales hasta Coveñas. El plagio ocurrió el 28 de febrero en Tamacay (Arauca), por parte del Eln, que los entregó, ocho días después al CICR.

En esos mismos días la multinacional OXY se quejó de la inseguridad y denunció que entre enero y febrero de este año el oleoducto Caño Limón-Coveñas fue objeto de 13 ataques.

El gobernador de Arauca, Facundo Castillo Cisneros , manifestó su temor porque su departamento pierda recursos económicos por regalías debido a la paralización de la producción petrolera. "De los 54 días del 2012 el oleoducto ha estado inactivo 43 días, generando a Arauca pérdidas de 10.000 millones de pesos por regalías que no recibiremos", dijo Castillo Cisneros. En el año 2001, luego de una ola de atentados, la OXY suspendió por ocho meses la explotación en Arauca.

Reclaman más seguridad
Estos atentados a los oleoductos y al transporte de crudo causaron que (también por el auge de la explotación que vive Colombia) no se haya logrado este año la meta de producir un millón de barriles de petróleo al día. Así lo reconoció Alejandro Martínez , presidente de la Asociación Colombiana del Petróleo. "Estos ataques fueron la principal causa para que entre enero y febrero de este año se disminuyera la producción nacional en unos 45.000 barriles diarios de petróleo", afirmó el dirigente gremial. El promedio producido en lo corrido de 2012 es de 896 mil barriles diarios, el más bajo de los últimos seis meses.

Martínez sostuvo que el crecimiento de la actividad de exploración y la llegada al país de más empresas para la búsqueda de nuevos yacimientos (en la región de los Llanos Orientales y en áreas nuevas de búsqueda como Vichada y Casanare) generó mayores obligaciones de seguridad que deben atender las autoridades (ver entrevista).

"Le hemos expuesto la preocupación al Gobierno por este incremento de los ataques y la respuesta es que están diseñando un nuevo modelo de seguridad basada no solo en la presencia de la Fuerza Pública, sino también en nueva tecnología para vigilar los oleoductos y el transporte. Confiamos en que el Gobierno va a garantizar la seguridad con las medidas que están evaluando", explicó Martínez.

La respuesta del Gobierno no tardó mucho ante los reclamos de la importante industria del petróleo y sus derivados, que junto con la minería son una de las "locomotoras" que deben jalonar el crecimiento económico del país y de la que depende 43 por ciento de las exportaciones de Colombia.

Sin revelar detalles de los planes de seguridad, el ministro de Defensa Juan Carlos Pinzón , anunció que en los próximos meses se reforzará la capacidad de la Fuerza Pública para la protección vial minera, energética y de hidrocarburos. "Se van a activar más unidades militares. Eso será entre este año y el año entrante",

El Ministro agregó que "estamos desarrollando y adquiriendo nuevas capacidades para aumentar la vigilancia de los oleoductos y sobre esa base poder responder a esta coyuntura".

El secuestro es otro flagelo
A la industria petrolera no solo la afecta los atentados a los oleoductos. El secuestro de trabajadores de las empresas y operadores creció en un 377 por ciento el año pasado, al pasar de 9 secuestros en 2010 a 43 secuestros en 2011, según un estudio de la empresa Terra Consultores SAS.

Según Orlando Hernández Angarita , analista de riesgos de esta compañía especializada en estudios ambientales y sociales, de las 43 víctimas, 39 fueron colombianos y cuatro chinos. "De estos plagios 35 los hizo las Farc, siete el Eln y uno la delincuencia", afirmó el consultor.

Hernández Angarita recordó que el secuestro de trabajadores petroleros ha sido una fuente de recursos para las guerrillas, que piden millonarios rescates a las empresas, sobre todo, cuando los plagiados son extranjeros. Además, persiste la extorsión.

Llama especialmente la atención el caso de los cuatro técnicos chinos secuestrados por las Farc el 8 de junio de 2011 en San Vicente del Caguán (Caquetá). Los primeros de un país comunista que secuestran las Farc . Estarán exigiendo una millonaria suma por su liberación que se estaría negociando en otro país.

Los analistas y productores más optimistas consideran que con los nuevos descubrimientos y con los que vendrán nuestro país podría superar rápidamente el millón de barriles diarios e incluso llegar a dos millones.

No obstante, como están las cosas en materia de seguridad, el sueño de convertir al país en una "Colombia saudita", parece cada vez más remoto..

ENTREVISTA

Atentados y bloqueos son preocupación

Alejandro Martínez
Presidente de la Asociación Colombiana del Petróleo

¿El auge petrolero los puso en la mira de la guerrilla?
"El crecimiento del sector nos enfrenta a retos de seguridad porque tenemos un mayor cubrimiento territorial. Hace ocho años se exploraban apenas el 15 por ciento de las cuencas hidrográficas del país, ahora hay presencia de empresas en el 47 por ciento de las zonas donde puede haber petróleo. Antes habían 40 operadores y ahora hay más de 100, varias extranjeras, que requieren más garantías de seguridad".

¿Por qué no se cumplió la meta de producción de un millón de barriles diarios?
"Los atentados a los oleoductos y al transporte de crudo fueron la causa principal. En febrero se disminuyó la producción en 45 mil barriles diarios debido a más de 10 ataques al oleoducto caño Limón-coveñas que paralizaron la producción. Este año van 22 ataques contra la infraestructura".

¿Qué otra situación amenaza la producción del país?
"También hay preocupación por el aumento de los bloqueos de comunidades en campos de producción en Caquetá, Santander y Arauca principalmente. Durante el año 2011 se presentaron 96 bloqueos y solo en lo corrido del presente año ya llevamos 56 bloqueos. Es entendible que haya mucha expectativa en las comunidades de esta regiones y en las autoridades locales por los impactos ambientales, por el tema de las regalías y otros asuntos como los servicios públicos. Lo que sucede es que a través de los bloqueos quieren llamar la atención del Gobierno Nacional".

El Colombiano.

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