La crisis de deuda de la zona euro se está propagando a los bancos de los mercados emergentes, un indicio de nuevos riesgos para economías que habían mayormente eludido los problemas europeos de los últimos dos años, de acuerdo con un sondeo del sector.
En toda Asia, Europa del este, América Latina y otras partes del mundo, los bancos están imponiendo condiciones de crédito más estrictas y enfrentan un alza en préstamos incobrables, según el sondeo que difundirá hoy el Instituto de Finanzas Internacionales, una asociación global de bancos.
El informe reveló que las condiciones de financiación en mercados internacionales se han "deteriorado significativamente" aun cuando las condiciones locales se mantenían estables, clara prueba de que los problemas de la zona euro están golpeando economías que han sido motor clave del crecimiento desde que comenzó la recuperación.
En el tercer trimestre, las condiciones de préstamo en bancos de mercados emergentes se deterioraron por primera vez en la encuesta de dos años, un giro radical desde finales del año pasado. "En los últimos nueve meses hemos pasado de una lectura bastante sólida a una muy débil", dijo Philip Suttle, economista jefe del IFI.
El informe de IFI, basado en trabajo similar por parte de bancos centrales de EE.UU., Europa y Japón, encuestó a gerentes de crédito en 63 bancos de mercados emergentes. Las respuestas fueron reunidas a finales de septiembre.
En América Latina, la encuesta mostró que el deterioro en las condiciones se había desacelerado conforme los bancos centrales moderaron sus aumentos de tipos de interés o comenzaron a reducir las tasas. Pero los bancos de la región —como en los mercados emergentes de Europa— aún encaran un aumento de préstamos morosos, un indicio de problemas que podrían pesar sobre sus economías en los meses venideros.
El efecto de la turbulencia financiera de economías europeas maduras se ve con máxima claridad en bancos de mercados emergentes de Europa del este, aunque la propagación a mercados de financiación internacionales expandió los problemas también a Asia, América Latina, África y Medio Oriente. Alrededor de 69% de los bancos encuestados dijo que las condiciones de financiación internacional se restringieron durante el tercer trimestre, mientras que menos de 2% dijo que se facilitaron.
"Es un recordatorio de cómo, si no se administra apropiadamente, la crisis del euro puede convertirse en un genuino bajón económico global de la misma manera en que lo fue Lehman", dijo Suttle, refiriéndose al colapso en 2008 del banco de inversión estadounidense que desencadenó un recesión global. "No hay que ser un banco europeo para experimentar eso".
La restricción del crédito ocurre a pesar de una demanda relativamente fuerte en el mundo emergente. La mitad de los bancos encuestados dijo que la demanda de sus clientes comerciales aumentó durante el período, en tanto apenas 14% dijo que descendió. Para préstamos al consumidor con excepción de hipotecas, alrededor de un tercio de los bancos informó de una demanda más fuerte en tanto que aproximadamente 20% reportó una demanda más débil. El resto se mantuvo sin cambios.
El crédito para préstamos hipotecarios de los sectores comercial y residencial mostró algunos indicios de restricción.
La demanda relativamente firme de crédito muestran que las condiciones internas son saludables en economías emergentes; tales economías podrían encaminarse en sendas de crecimiento más firmes si disminuyen los riesgos internacionales causados por la crisis de la zona euro.
El IFI dijo que además de en América Latina, se preveía un alza de los préstamos morosos en las economías emergentes de Europa y Asia en el cuarto trimestre.
WSJ.